miércoles, 31 de marzo de 2010

Sin escape de la locura



Hoy finalmente volví al cine, tuve varios días “libres” pero hasta ahora pude tomarme un tiempito para ver una buena película, y ésta vez escogí La Isla Siniestra” protagonizada por Leonardo DiCaprio. Definitivamente es buena, pero no la película indicada para mí. Muy grotesca, cruda y fría, además estaba llena de muchas imágenes que mi cerebro no necesitaba retener, pero ni modo ahí se van a mantener, por poco tiempo espero…

La trama de la película gira en torno a un detective que llega a una isla que se encuentra totalmente retirada de la sociedad, en esa isla hay una cárcel de máxima seguridad donde se encuentran recluidos todos los presos con serios problemas mentales. Nuestro protagonista trata de resolver la misteriosa desaparición de una reclusa, pero al parecer todos los hechos que rodean dicha desaparición son engaños y artimañas para atraerlo a esa misteriosa isla. Sin embargo, su interés personal al querer averiguar el paradero del asesino de su esposa lo atrae más y más a este oscuro y tenebroso lugar. Cada vez la trama se va enredando más, hasta que hay un momento donde nos confunde, perdemos el hilo de la realidad y nos adentramos en ese mundo rodeado de locura y perversión. ¿Y al final qué? Quedé totalmente decepcionada y muy enredada.

Después de la película, tomándome mí tiempo para tratar de salir de mi momentánea laguna mental, empecé a analizar todos los detalles. Y saben que logré… ¡Otro escalofrío! Jajá. El tema de la locura es muy delicado y lleno de misterios. Primero que todo, creo que tooooodos estamos muy locos, unos más que otros, por supuesto. No hay nada normal en el mundo, y los que tienen el poder son los que dictan lo que es normal y anormal, pero ¿quién los juzga a ellos? Volviendo a la película podemos ver que la autoridad está en manos de dos psiquiatras, a los que varios doctores, enfermeras y policías siguen fervientemente, incluso todos los enfermos mentales que se encontraban ahí seguían el mismo jueguito de engaños y confusiones. Ahí vamos viendo que cualquier persona cuerda se vuelve loca en un lugar así, más después de ser parte del complot de los psiquiatras.

Llega un punto de la película donde nos preguntamos ¿Qué está pasando? ¿Q es verdad? ¿Cuales son las alucinaciones y ¿Cuáles son los hechos que efectivamente están pasando? ¿Quién tiene la razón o quien me está engañando? De verdad que es un enredo. Aunque tengo que admitirlo ésta película lo mantiene a uno muy interesado y sin quitar los ojos de la pantalla. Muy buenos momentos de suspenso, pero insisto aún más de análisis. No los voy a cansar más con este asunto pero hubo un punto donde llegué a pensar que hasta la isla es completamente falsa. ¿Y quién me asegura que no es así?

Es muy extraño pensar que existe la posibilidad de que la vida no es como nos la imaginamos, que hay un universo alterno, y que toda nuestra existencia ha sido planeada o manipulada por alguien más. Que todos nuestros recuerdos son falsos, y todo lo que nos rodea es una simple ilusión. Sería muy triste darse cuenta de esto de repente. Tal vez todos nosotros nos encontremos en un hospital psiquiátrico-cárcel desde hace mucho y no nos hemos dado cuenta de que algún desconocido nos observa cuidadosamente cada detalle de nuestra vida. ¡Qué miedo!

Yo de verdad creo que lo que pasa en mi vida es verdadero, 100% real y si estoy muy cegada por la “normalidad” que importa. O si fuera el caso, ¿ustedes preferirían que les dijeran que todo lo que han vivido nunca pasó? Ó Seguir con este modelo de vida al que ya estamos acostumbrados sin llegar a saber si de verdad es cierto. Todo es verdad. Todo es mentira. ¡Uy! Muchas preguntas sin respuestas, ya me va a dar un derrame mental, así que mejor dejo que ustedes opinen.